Llevamos años escuchando y leyendo sobre la importancia de dejar de fumar pero todavía hay muchas personas que prefieren no hacer demasiado caso a estos mensajes y continúan con el malísimo hábito que es el consumo activo de tabaco. Es posible que si todos ellos dedicaran un rato de su tiempo a pensar en los beneficios de dejar de fumar, el número de fumadores descendería notablemente.
Y es que dejar de fumar no solo repercute en la calidad y la esperanza de vida a largo plazo, que es precisamente la excusa que muchos utilizan para autoconvencerse de seguir adelante, sino que notarás beneficios en tu día a día de manera prácticamente automática. Estos son 5 de ellos, todos motivos de peso para alejarse de los cigarrillos:
1. Beneficios para la salud a corto plazo
Desde el mismo momento en el que uno deja de fumar su cuerpo empieza a agradecérselo. A los pocos minutos de parar, la presión arterial y el pulso disminuyen a niveles normales, al revés de lo que ocurre con la temperatura corporal, que se regula al alza. Esto, unido a que a las pocas horas los niveles en sangre de oxígeno empiezan a imponerse a los de monóxido de carbono, permite que al día siguiente ya exista un riesgo menor de sufrir cualquier cardiopatía.
En cuestión de días, notarás los pulmones más liberados y con mayor capacidad para funcionar con efectividad, y la circulación de la sangre también será más fluida. Esto lo disfrutarás especialmente cuando hagas ejercicio o simplemente camines un rato largo. Desde este momento, todo son mejoras porque tu energía irá paulatinamente en aumento hasta recuperar la normalidad y verás cómo desaparecen poco a poco esos síntomas clásicos que provoca el tabaco como son la tos y la dificultad para respirar.
2. Beneficios para la práctica deportiva
Resulta incomprensible ver a algunos deportistas de élite fumar cuando está más que demostrado la incompatibilidad de ambas cosas. Por muy superdotada que sea una persona para el ejercicio físico, un no fumador siempre va a rendir mejor ya que sus pulmones trabajan de una manera mucho más eficiente. Esto repercute en cadena sobre el resto del cuerpo, que no solo funciona mejor sino que también recupera mucho mejor una vez concluido el ejercicio.
3. Beneficios olfativos
La sensación de no diferenciar los olores por un lado, y de oler permanentemente a tabaco por otro, es muy desagradable e incómoda. Esto se acabará muy rápido si dejas de fumar.En el caso de tu olor es casi inmediato porque la ropa ahora olerá a lo que tu piel huele de forma natural y a la colonia que elijas ponerte. Tú no lo notarás tanto pero verás el efecto que tiene en los demás. Además, llegará un día en que tú también puedas detectarlo porque habrás recuperado el sentido del olfato que tenías totalmente anulado por el consumo de tabaco.
4. Beneficios estéticos
Las uñas, los dientes, los dedos de las manos e incluso el pelo de la cara en el caso de los hombres revivirán poco a poco después de dejar de fumar en lo que supone un beneficio estético importante. El color amarillento de todos ellos que deja la nicotina irá desapareciendo poco a poco como esos recuerdos que se quieren olvidar, de manera que podrás lucir manos y sonrisa de anuncio de nuevo después de mucho tiempo sin poder hacerlo.
5. Beneficios económicos
El bolsillo es uno de los que más agradecen que su dueño decida dejar de fumar. Éste es probablemente el beneficio más cortoplacista de todos y, aunque es material, puede ser un gran impulso para muchas personas que necesitan recortar gastos. El precio del tabaco está por las nubes gracias a que se mantienen impuestos muy duros sobre él, así que lo mejor es sentarse con papel y boli y hacer el cálculo del ahorro que supondría al año dejar de fumar. Es un argumento aplastante en todos los casos.