Las estadísticas no suelen engañar y en cuestiones de sexo mucho menos. Estas dicen que aproximadamente un 40 % de los españoles han probado el sexo en la playa alguna vez en sus vidas. Y es que es difícil contenerse cuando llega el momento de la verdad por mucho que pienses que no serías capaz. Las fiestas en la arena, los paseos románticos al atardecer en playas tranquilas, un amanecer a la salida de las discotecas de primera línea de playa… seguro que alguna vez se te ha presentado la oportunidad.
Eso sí, ten en cuenta que de ese 40% por ciento que dice haberlo probado, en un porcentaje alto también han sido pillados. Y esto ya no es tan agradable porque te cortan en medio de la acción y eso no hace gracia a nadie.
Para evitar ser pillado, en primer lugar, sobre todo si la velada está programada, piensa en alguna playa tranquila de difícil acceso. Siempre, hasta en los lugares más turísticos, hay alguna zona de baño en la que no hay tanta gente, ya sea porque es una playa a la que hay que ir en coche, porque es un tramo sin viviendas, etc.
Otra cosa que ayuda lógicamente a pasar desapercibido es el horario. Lo ideal es buscar frnajas horarias con poca luz natural. Esto es fácil de conseguir si es una cita previamente apalabrada pero si no lo es lo normal es que sea también sencillo, porque estás situaciones locas se dan después de una buena fiesta.
No te vuelvas loco ni te dejes llevar por la pasión sin antes haber echado un vistazo a la zona elegida. Un mínimo paseo o al menos una mirada 360 grados es necesario para evitar colocarse al lado del señor que ha bajado a poner la sombrilla a las 7 de la mañana para que su mujer tenga primera línea de playa garantizada. Mira bien, busca un rincón tranquilo y a disfrutar.
Eso sí, si puedes hazte con una toalla grande que sirva tanto para evitar tener arena en tu cuerpo para el resto de las vacaciones como para poder taparos si pese a haber tomado precauciones alguien decide no mirar para otro lado. Así podréis reaccionar a tiempo y taparos y si sois ágiles incluso podréis continuar con vuestra película sin interrupciones.
Si la cosa no está programada, y si lo está también, siempre es una decisión acertada meterse en el agua si lo que quieres es que no te pillen. De hecho, si lo haces en el agua te dará igual si te pillan o si miran probablemente.
Además las sensaciones son muy especiales por lo que es recomendable probarlo alguna vez en la vida. Es verdad que hay momentos en los que igual te metes en el agua y se corta toda la pasión al momento. Por eso, es ideal en noches muy cálidas o cuando lo queráis hacer a plena luz del día.
En cualquier caso, elijas dentro del agua o en la arena, vestidos o con poca ropa, tapados o sobre la arena, hay algo que coincide siempre si no quieres ser visto: no tardes. Hay que ser rápidos. Además, piensa que suelen ser encuentros muy sugerentes, eróticos y pasionales, por lo que afortunadamente las circunstancias en este caso acompañan para que la duración del acto sexual sea más bien rápida. Cuanto más te recrees más riesgo de ser pillado in fraganti tendrás.