7 consejos para prevenir la aparición de los callos

Presentamos 7 consejos para prevenir la aparición de los callos o hiperqueratosis en los pies. Las durezas o callos son una colección de la capa queratínica de la piel en la epidermis, el sustrato cutáneo más superficial, que aparecen como respuesta a fenómenos externos, mayormente asociados a roces o fricción, aunque a veces responden también a alteraciones metabólicas internas. Destacamos los siguientes consejos para evitarlos:

1. Hidrata las zonas de fricción
Los talones, los laterales del 1er y 5ºdedo así como el dorso de los dedos, son las regiones más típicas con las que nuestros pies "chocan" con el calzado. Por tanto, si mantenemos estas zonas bien hidratadas, al menos conseguiremos que la piel esté un poco más flexible y que por tanto pueda aguantar un poco más estas condiciones lesivas.

2. Protege las zonas de roce
Cuando el uso de cremas hidratantes no es suficiente, quizá habrá que proteger dichas zonas con fieltros de descarga.

3. Amortigua las áreas de más presión
Por condiciones biomecánicas, a veces se acumula mucha presión en un área y esto puede derivar en el desarrollo de los callos. Usa plantillas individualizadas a medida elaboradas por un podólogo, para paliar estas zonas de presión.

4. Bebe mucha agua
Se ha comprobado que una falta de agua en el organismo también afecta a la elasticidad de la piel, y por tanto, esta situación es precursora de la aparición de durezas , sobre todo en el talón, por sequedad o xerosis.

5. No fumes
Los últimos estudios hablan de una relación directa entre las personas fumadoras crónicas y el desarrollo de callos plantares metatarsales. Lo relacionan con la hipoxia tisular (disminución de óxigeno en los tejidos).

6. Usa calzado correcto
Sin excesivos rebordes duros, buena suela, buenas sujeciones en el empeine y de materiales flexibles.

7. Ten en cuenta tu herencia
Si con todo ello, siguen apareciendo estas lesiones cutáneas, has de pensar que quizá son consecuencia de una herencia genética que te da esa predisposición a desarrollarlos.