La piel cumple una de las funciones más importantes de nuestro cuerpo. Ésta protege nuestro organismo de los factores externos como bacterias, sustancias químicas y temperatura. Se trata del único órgano que está constantemente en contacto con el mundo exterior.
Por ello, es muy importante establecer algunos cuidados esenciales para lucir una piel saludable. Y el mundo de las vitaminas tiene diversas propiedades que podemos aprovechar para cumplir con esta misión dérmica.
Vitaminas en productos para el cuidado de la piel
En la industria cosmética existe una gran diversidad de productos para el cuidado de la piel, como cremas faciales, sérums, toallitas desmaquillantes e incluso jabones que contienen entre sus ingredientes vitaminas.
Vitamina A
La vitamina A (retinol) y sus derivados son los nutrientes que con más frecuencia se incluyen en cremas faciales, lociones y otros cosméticos. Algunas de sus propiedades permiten reducir y prevenir la formación de arrugas, dando a la piel una apariencia más joven.
Según los especialistas, esta vitamina es la reina del antienvejecimiento, ya que favorece la renovación celular de las capas más profundas de la piel y la síntesis de colágeno, otorgándole un rejuvenecimiento total.
Vitamina C
El ácido ascórbico o vitamina C cumple un papel esencial en la síntesis de colágeno en nuestro cuerpo e inhibe la peroxidación de lípidos. En la industria, es utilizado con frecuencia en productos como sérums faciales. Pues, se ha demostrado que los sérums con vitamina C tienen propiedades antioxidantes que previenen los daños a la piel provocados por la radiación solar o la exposición a contaminantes externos.
Vitamina E
Esta vitamina actúa en las células como antioxidante, protegiéndonos de una serie de agentes químicos muy reactivos llamados radicales libres, los cuales causan problemas en el proceso del envejecimiento. También es capaz de difuminar las cicatrices y eliminar los pequeños granitos e imperfecciones.
Vitamina K
Ayuda a mejorar la circulación sanguínea e incluso para tratar dermatitis atópica. La vitamina K actúa contra las ojeras muy marcadas y oscuras, además, disimula venitas y combate la celulitis. Es muy utilizado en cremas faciales y corporales.
Zinc
Es un mineral necesario para tratar la recuperación en las lesiones de la piel, producidas por el molesto acné. También puede llegar a ser muy efectivo en tratamientos de dermatitis seborreica, foliculitis, eccema y psoriasis. Algunas personas deciden consumirla a través de suplementos.
Selenio
Es uno de los micronutrientes que neutraliza los radicales libres y junto con la vitamina E ejerce una acción antioxidante que retrasa el envejecimiento en la piel. Actúa como antioxidante que protege la membrana celular. También aporta gran hidratación.
Omega 3
El consumo de ácidos grasos omega 3 repara los daños ocasionados en las membranas celulares, proporcionando mayor resistencia a la dermis. Tiene propiedades antiinflamatorias que mitigan las rojeces, reduciendo la irritación.