Mitos y verdades de las bebidas isotónicas

¿Sabes realmente para qué sirven las bebidas isotónicas? ¿Es mejor tomarlas antes, mientras o después del ejercicio? Casi todas las personas que realizan deporte de manera habitual consumen este tipo de bebidas… pero, ¿cuántas serían capaces de responder a las preguntas anteriores? Vamos a intentar clarificar un poco las cosas hablando de los mitos y verdades de las bebidas isotónicas.

¿Para qué sirven las bebidas isotónicas?

Su función principal es la rehidratación. Una manera de reponer la pérdida de azúcares, electrólitos (potasio, sodio…) y agua. El sudor no solo es agua, también tiene, por ejemplo, electrolitos. Por ello, en actividades físicas prolongadas, o en condiciones ambientales especiales, es importante consumir este tipo de bebidas deportivas, ya que aportarán algo más que agua.

¿Cuándo se deben tomar las bebidas isotónicas?

Siguiendo con los mitos y verdades de las bebidas isotónicas, suele haber dudas sobre cuándo ingerirlas. La respuesta es: durante la actividad deportiva. Pero no siempre. Si esta no dura más de una hora y no se lleva a cabo en un lugar con temperaturas extremas, no serán necesarias. En ese caso sí valdría solo con agua. La función rehidratante de estas bebidas las hacen aconsejables, no solo cuando se hace deporte, sino también, por ejemplo, cuando se padece una diarrea.

¿Tienen mucha azúcar y engordan?

No. Es una creencia muy extendida. Tienen azúcar, evidentemente, pero no en grandes cantidades. Y tampoco engordan sobremanera. No es que no tengan calorías, claro está, pero no son un producto que engorde.

¿Son todas iguales?

No. Aunque la base de su composición sea similar, esta puede variar. La oferta es cada vez mayor, así que pierde cinco minutos en leer las etiquetas.

¿Me provocará sensación de estar lleno?

Tampoco es cierto. Es más, todo lo contrario, puede evitar el malestar de estómago.

¿Se pueden tomar en cualquier momento del día?

Estas bebidas, como ya hemos comentado, contienen sodio o potasio. Por ello, es bueno que se beban cuando el cuerpo demanda esos elementos. Si se abusa de ellas y se consumen, por ejemplo, en las comidas o a cualquier hora del día –cuando te apetezca– puede ocasionar una acumulación de los mismos. Es la razón por la que las personas hipertensas –que sí pueden tomar bebidas isotónicas– han de tener especial cuidado de ingerirlas cuando realicen ejercicios prolongados.

¿Son malas para los niños?

Para finalizar este listado de mitos y verdades de las bebidas isotónicas, vamos a aclarar que los niños sí pueden tomar bebidas isotónicas. No están contraindicadas para ellos. Su sabor, además, hace que les sean muy atractivas.