Las sentadillas son un buen ejercicio, y aunque se suele pensar que sirven sólo para ejercitar las piernas, también ejercita otros músculos del cuerpo, incluyendo los abdominales.
Las sentadillas mejoran la estabilidad de las piernas cuando se hacen correctamente, pero de lo contrario, pueden ser destructivas para las piernas.
En el vídeo se pueden ver perfectamente las diferencias entre hacerlo bien o mal. Vemos, en el lado erróneo, como echa su cuerpo hacia adelante, en vez de apoyar el peso sobre glúteo y talón. Esto le obliga a separar el talón del suelo, lo que NO es bueno.
Hacer mal estos ejercicios puede suponer lesiones graves, sobre todo en las rodillas y en la espalda. Si echamos todo nuestro peso a las rodillas, éstas se machacan, sobre todo a largo plazo. En cuanto a la espalda, vemos en el vídeo la clara diferencia. Cuando lo hace bien, la espalda está recta, lo que le ayuda a dejar el peso sobre glúteo y talones, como se debe hacer, en cambio, cuando lo hace mal, su espalda tiene una postura incorrecta, y que puede ser perjudicial para la misma.
Las sentadillas, como ya hemos dicho, no sólo trabajan las piernas (cuádriceps, isquiotibiales...) sino que también otros músculos, repartidos por el cuerpo, incluyendo los abdominales. También fortalece el equilibrio y la estabilidad de las rodillas. Por eso, las sentadillas no deberían faltar en ninguna rutina, ya que estamos hablando de un ejercicio sencillo de hacer y beneficioso (cuando se hacen correctamente)
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