Hay productos que en la cocina siempre resultan infalibles independientemente de cómo se cocinen, y muchos de ellos coinciden en que suelen ser además muy versátiles. Uno de esos clásicos inmortales es la merluza, un pescado jugoso, fino y muy rico de sabor que permite ser tratado de muchas maneras. Por otro lado, es uno de los mejores pescados para iniciarse en la cocina de los mismos. Aquí tienes 3 recetas con merluza que te van a encantar, dos clásicas y una más desenfadada:
1. Merluza en salsa verde
Necesitas simplemente 4 rodajas de merluza, una cebolla, caldo de pescado, dos dientes de ajo, sal y perejil.
Una vez pelados y picados finos los ajos, dóralos en una cacerola. Añade enseguida la cebolla también muy picada y continúa pochando la mezcla. A continuación, añade la harina, remueve un poco y vierte también el vino blanco, el caldo y el perejil también previamente picado. Éste es el momento clave porque hay que remover con cuidado hasta ligar la salsa, porque después solo habrá que añadir la merluza y cocerlo todo durante tres minutos con la cacerola tapada y otros dos más con ella destapada. Apaga el fuego y a comer.
2. Merluza a la gallega
Uno se pone a pensar en platos con pescado sobresalientes y es difícil resistirse a incluir este clásico ya internacional de la cocina gallega. La merluza a la gallega tiene dos grandes ventajas que lo convierten en un plato irresistible: su sabor y su facilidad para cocinarlo.
Necesitarás para 4 personas 1 kg de merluza en rodajas de un grosor de unos 3 centímetros, 3 ó 4 cachelos o en su defecto alguna patata similar, pimentón, una cebolla, 4 dientes de ajo, aceite virgen extra y sal. También, al gusto, puedes utilizar una hoja de laurel.
Pela y corta las patatas antes de ponerlas a cocer en agua y sal durante 15 minutos junto a la cebolla en cuartos. Por otro lado, dora el ajo laminado en una sartén con aceite y la hoja de laurel, añade el pimentón, un poco de vinagre y medio cazo de cocción de las patatas y resérvalo. La merluza se añade a las patatas y se cocina 5 minutos antes de servirla con las patatas como base y la ajada con pimentón como salsa. Ya tienes el duelo entre cocina gallega y vasca servida para que compares qué estilo te gusta más para la merluza.
3. Albóndigas de merluza
Después de probar con dos clásicas recetas exquisitas y relativamente fáciles, es hora de ser un poco más original y sorprender. Una opción son las albóndigas hechas con este pescado maravilloso. La cesta de la compra debe incluir para las albóndigas una cebolla, aceite de oliva virgen extra, dos dientes de ajo, perejil, un huevo, 600 gramos de merluza, vino blanco, sal, pimienta, un poco de pan previamente remojado en leche y escurrido para dar cuerpo a la albóndiga y harina para rebozar. Por otro lado, la salsa se hace con otros dos dientes de ajo, perejil, 150 gramos de cebolla, aceite, 50 gramos de harina, 80 gramos de vino blanco, 450 gramos de caldo de pescado y sal. Parecen muchos ingredientes pero la mayoría se repiten y la elaboración es sencilla.
Debes cocer la merluza y reservarla hasta poder quitar las espinas y la piel. La cebolla va muy picada a una sartén donde debes pocharla junto al ajo. En un bol, mézclala cuando esté cocinada junto a la merluza desmenuzada y el perejil picado. Sigue cocinando y por último añade el pan, el huevo, el vino blanco y salpimienta. Solamente te queda formar las albóndigas, pasarlas por harina, freírlas y reservarlas.
Recupera la sartén y vuelve a pochar cebolla, ajo y perejil junto a la harina y lígalo con vino blanco , harina y el caldo de pescado. Una vez reduzca, tritura el resultado y agrégalo a las albóndigas. ¡Qué aprovechen!
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