Receta: quiche de esparragos

En medio de un ritmo de vida tan alto como el que llevamos en los tiempos que corren la alimentación juega un papel importante, y por eso hay que reservarle su espacio. Gracias a ella, además de una vida más saludable, podemos potenciar determinadas funcionalidades que por el estrés y la ansiedad se ven afectadas.

Una de ellas en la función sexual, que podemos ayudar a mejorar con recetas como esta quiche de espárragos, un alimento que entre sus muchas virtudes cuenta con el contenido en vitamina E, clave en la potenciación de dicha función. Si no te gustan los espárragos puedes probar con el brócoli, un superalimento que a veces no comemos por su textura pero que en quiche también queda ideal.

 

Ingredientes

- 8 espárragos trigueros
- 75 cl de leche evaporada
- 2 cucharadas de mostaza
- 4 huevos grandes
- Una pizca de estragón
- Una pizca de sal y otra de pimienta negra molida
- Aceite de oliva
- Agua
- Un buen trozo de queso cheddar intenso (o al gusto en su defecto)

Elaboración

El horno tendrá que precalentarse fuerte, a unos 200 grados centígrados. Mientras tanto, parte en dos los espárragos pero, ojo, a lo largo, no a lo ancho. Colócalos en una sartén con el aceite y 3 cucharadas de agua. Cocínalo a fuego fuerte e incluso tapa la sartén para que el calor se quede hasta que los espárragos brillen en tonalidad verde y sobre todo se vayan ablandando. Lo normal, dependiendo del fuego, es que en unos 4 minutos estén lo suficientemente tiernos. En ese momento quita la tapa y saltéalos un minuto más para que el agua se vaya evaporando. Reserva.

Por otra parte, bate los huevos junto a la leche evaporada, la mostaza de Dijon, la sal, la pimienta y el estragón. Una vez batidos es el momento de añadir el resto de ingredientes: el cebollino picado, el queso cheddar y los espárragos.

Mezcla bien y vierte el resultado en un molde y ponlo a hornear una vez éste haya alcanzado la temperatura requerida. Hay que estar pendiente del horno porque cada uno maneja unos tiempos distintos, dependiendo de la potencia que tenga, pero lo normal es que la quiche esté lista en torno a los 20-25 minutos.

El truco final consiste en dejar reposar a la quiche antes de servir durante, aproximadamente, 5 minutos. Pasado este tiempo solo queda trocearla en porciones y disfrutarla. Y si los espárragos y la vitamina E ayudan con lo suyo, mucho mejor ¿verdad?

¡Qué aproveche!