5 inconvenientes de correr punteando

Presentamos los 5 inconvenientes de correr punteando como la causa de otras patologías más frecuentes en el pie que pueden alterar seriamente al resto del aparato locomotor.

Esta nueva moda del running en parte viene alimentada desde hace unos años por el libro publicado por Christopher McDougall en el que entre otras cosas, se habla de la necesidad de tener que correr sin zapatillas que aíslen al pie del suelo, hecho que obliga a correr punteando, es decir, impactando con el antepie directamente en el suelo sin usar los talones ni el medio pie, todo ello expuesto de una manera divulgativa no científica.

Las consecuencias más graves de esta modalidad tan poco sostenidas biomecánicamente son:

1. Problemas Aquíleos

La estructura responsable de evitar que el talón no toque con el suelo es el tendón de Aquiles. Esta acción antinatural tan continuada puede provocar cuanto menos, sobrecarga en el cuerpo del tendón, degeneración tendínea por sobre uso y en último caso, rotura.

2. Periostitis calcánea

Esta excesiva tensión por sobre uso del tendón de Aquiles puede irritar la capa de periostio que envuelve el hueso del talón (calcáneo) en el lugar de su inserción, provocando una periostitis calcánea que puede evolucionar a edema óseo. Patologías ambas muy dolorosas y lentas de curación.

3. Sobrecargas metatarsales

La recepción del impacto contra el suelo con el antepie, desprovisto prácticamente de grasa plantar, puede provocar una sobrecarga de las cabezas metatarsales, los huesos de inicio de nuestros dedos; este dolor es muy incapacitante una vez ha aparecido

4. Fracturas por estrés

Una sobrecarga metatarsal mal curada puede derivar a una fractura por estrés a nivel de la cabeza de dicho metatarsiano, incluso pudiendo evolucionar a necrosis.

5. Problemas en aparato locomotor

El cambio en el patrón de recepción del impacto contra el suelo altera la psicomotricidad del paciente a la hora de correr, pudiendo ocasionar molestias diversas en rodillas, caderas o lumbares.